Abraham Maslow propone, desde una perspectiva humanista, una escala de valores que el ser humano necesita satisfacer para lograr lo que él llamó “la autorealización”; esta escala de valores está representada por una pirámide escalonada, en la cual, la base de ésta está dirigida a la satisfacción de necesidades fisiológicas, conformada por la alimentación, respiración, eliminación de desechos, es decir, el bienestar fisiológico del individuo; el segundo escalón lo tienen las necesidades de seguridad, esta son aquellas que el individuo percibe como físicas, es decir, aquellas que el sujeto sabe que resguardan su integridad física, que lo alejan el peligro existente en su entorno.
El tercer escalón se refiere a aquellas necesidades de afecto y pertenencia del sujeto, esto significa que individuo necesita pertenecer a un grupo y ser aceptado por este, estas necesidades son básicamente espirituales, al mismo tiempo, necesita un objeto a donde dirigir su afecto o amor; el cuarto escalón pertenece a las necesidades de autoestima, la pertenencia a grupo y la aceptación del sujeto en el grupo ayuda al individuo a percibir no solo la aceptación de las personas a su alrededor si no también su propia aceptación en el grupo y su entorno en general.
El quinto escalón o la cúspide de la pirámide de necesidades propuesta por Abraham Maslow está dedicada a la autorealización, esta se logra cuando el sujeto logra una plenitud no solo en el plano de lo físico, sino que ha alcanzado una plenitud emocional, psicológica y espiritual que lo llevan a un estado de armonía total con él y con su entorno (Sarason/Barbara, 2007).